En el último tercio tiene lugar la suerte suprema, el momento de la verdad en que el torero da muerte al animal
Tercio de muerte
El último tercio de la lidia es el más trascendental, el momento en el que el matador da la muestra más cumplida de su habilidad y su arte. Es el momento de la verdad, el más difícil y peligroso, y cuya ejecución y resultado pueden encumbrar una faena o dar al traste con ella.
En las otras suertes es el toro el que embiste y el torero el que está a la defensiva, pero en la suerte suprema se invierten los términos y es el matador el que toma la ofensiva, quedándose algunos momentos a merced del toro, riesgo que corre cuando le pierde la cara al animal en el instante del cruce. es decir: entrar, cruzar y salir, que son los tres tiempos vitales de la suerte suprema.
El momento de la estocada se puede realizar de dos maneras dependiendo de por dónde sale el torero una vez clavado el estoque:
- Suerte natural; el matador sale entres las tablas y el toro.
- Suerte contraria: el toro pasa entre las tablas y el matador.
Formas de realizar la suerte suprema
Recibiendo: es la forma más primitiva de matar los toros. Cuando la res tiene fuerzas para acudir al quite, el matador se coloca a una distancia adecuada, y alineando con el pitón derecho, con la muleta ligeramente doblada, la mano derecha, que lleva el estoque, pegada al pecho, y el codo a la altura del hombro. es el toro el que acude hacia el torero.
Volapié: es la forma de matar toros parados y sin fuerza. El torero se arranca hacia el animal, llevando baja la muleta en la mano izquierda y obligando a humillar al toro, al tiempo que con la derecha hunde el estoque. Es la manera más habitual de realizar la suerte.
Al encuentro: se arrancan toro y torero y se encuentran a medio camino.
¡Feliz semana, taurinos!