Valdemorillo: Un “mini San Isidro” en febrero

Valdemorillo vuelve a atraer a las figuras. La antaño plaza portátil y de oportunidades se ha transformado con el correr de los años, la confortabilidad de la cubierta y la gestión de Carlos Zúñiga y Víctor Zabala (todo hay que decirlo) en la primera feria de figuras de cada temporada.

Desde que Morante de la Puebla en la temporada 2022 (la de las 100 corridas) decidiera arrancar su campaña en La Candelaria, varios de los denominados primeros espadas han iniciado aquí su año. Perera, Talavante, Cayetano, Daniel Luque, Juan Ortega…

Pero es que en este 2025 la totalidad de los protagonistas anunciados ostentan ese rango. Por ejemplo Castella y Manzanares, que debutan en el coso serrano. Dos figurones con más de dos décadas de alternativa a sus espaldas que adquieren el compromiso de hacer el paseíllo desmonterados en el mes de febrero a la puertas de Madrid.

Junto a ellos, Diego Ventura, máxima figura del toreo a caballo, que también se presenta en Valdemorillo, pone la guinda a un cartel top, digno de cualquier feria de capital de provincia. La cita, con toros de El Niño de la Capea tanto para rejones como para la lidia a pie, es el sábado 8 de febrero.

El otro cartel, que se anuncia el domingo día 9, es además, muy de Madrid, muy de la afición de la plaza de Las Ventas que, no lo olvidemos, es la principal clientela de este abono. Con toros de El Parralejo, José Vázquez y Garcigrande se miden mano a mano Emilio de Justo (otro debutante) junto a Juan Ortega, el triunfador de las últimas dos ferias en esta plaza. Un cartel de corte clásico y/o artista, como ustedes prefieran, donde, seguro, quienes se acerquen a Valdemorillo verán torear.

Por si eran pocos los alicientes, en la novillada que abre feria, el viernes 7 de febrero, se anuncian, con novillos de Guadaira, tres de los jóvenes con más cartel y posibilidades del escalafón menor. Un Alejandro Chicharro ya muy cuajado, que se hará matador en Fallas, junto al exquisito sevillano Javier Zulueta y el aragonés criado taurinamente en Salamanca Iker Fernández El Mene, que se colocó a la cabeza de la novillería después de alzarse en poco más de un mes con el Alfarero de Oro de Villaseca, la Vid de Oro de Arganda y el Certamen de novilladas de Castilla y León.

Este año en Valdemorillo lo difícil es decantarse por un solo festejo, porque todos tienen el nivel del mismísimo San Isidro. Un ferión concentrado en un fin de semana que provoca no perderse ni uno solo de los tres paseíllos para empezar la temporada a lo grande, ya en el mes de febrero.